Por Karen Colman
El 7 de febrero se conmemora a hombres y mujeres guardaparques en el Paraguay. Este mismo día, pero hace 8 años atrás asesinaron a Bruno Chevugi; un guardaparques aché de la Reserva de Mbaracayú. Bruno tenía mi edad y su laburo era loable, custodiaba el último gran bosque Atlántico del Paraguay, uno de los sitios preferidos para plantaciones de droga. Bruno desapareció un día en una de sus caminatas y lo hallaron muerto a balazos un tiempo después, dijeron que fueron «cazadores furtivos» en los medios de prensa.
Cinco años después capturaron a agricultores. Tres campesinos pobres de San Juan Nepomuceno en una de las zonas más problemáticas a nivel de narcotráfico. Al ver la zona de su asesinato en el GoogleMaps uno puede unir con flechas: 2+2.
De eso jamás se habló extensamente en la prensa, solo una nota escueta y marginal. Hoy pensemos en los y las guardaparques. A inicio de este año el guardaparques del Parque San Luis fue amenazado de muerte. Está claro que las personas que cuidan nuestros bosques y nuestro propio monte están en la mira. 7 de febrero, día de la primera línea de defensa de los bosques, una de las profesiones más riesgosas del mundo.