La doctora Carmen Colazo destruyó en 5 minutos el Proyecto de Ley que criminaliza la enseñanza de perspectiva de género en las escuelas, presentado por los senadores cartistas Lizarella Valiente, Natalicio Chase, Gustavo Leite y Orlando Penner de Patria Querida.
«Esta ley nos criminaliza», manifestó la doctora Carmen Colazo. La agenda de la ultraderecha que busca coartar derechos, sobre todo aquellos que podrían afectar a las mujeres y a las personas LGBTIQ+.
La Dra. Carmen Colazo, fundadora del Ministerio de la Mujer, abogada, Licenciada en Ciencias de la Información, Magíster en Sociología, Doctora en Derecho, Doctora en Género, se presentó en la Comisión de la Niñez, Adolescencia y Juventud, en lugar de la ministra de la Niñez y Adolescencia, Teresa Martínez.
La Dra. Carmen Colazo trabajó en toda la Constituyente del 92
En su intervención, la doctora Colazo argumentó: «Les diré que nosotros incluimos la perspectiva de género y está en toda la Constitución y también esta perspectiva de género y el enfoque de género que son científicamente trabajados», manifestó en plena Comisión.
Continuando con su discurso: “Nuestro país es plural y el artículo 1 de la Constitución del 92 dice que somos un Estado social de derecho fundado en la dignidad humana y tenemos una democracia participativa y pluralista.
Quería decir sobre la ley que nos ha preocupado mucho a las organizaciones de mujeres y sobre todo a las que estamos dentro del grupo impulsor de la paridad que hace tiempo presentamos”.
“Nos ha preocupado mucho el tenor de algunas consideraciones de esta ley y yo también voy a hablar desde la ciencia, desde la ciencia jurídica, desde los derechos humanos, de la teoría de los derechos humanos y desde los estudios de género”, puntualizó la doctora Colazo.
“Nosotros hemos trabajado la perspectiva de género en todo el marco normativo desde el derecho internacional. Nosotros tenemos como ley la CEDAW, la Convención de Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, que es ley desde el año 1986. También hemos trabajado la Convención de Belém do Pará, para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres”.
No existen prohibiciones absolutas a nivel de la Constitución
La doctora Carmen Colazo se refirió al artículo del Proyecto de Ley redactado por la bancada cartista y aliados. “Dice el artículo 1 del proyecto de ley que prohíbe la enseñanza de la perspectiva de género en las escuelas: esta prohibición tiene carácter absoluto. No existen prohibiciones absolutas a nivel de la Constitución”.
«En la Constitución del 92 hemos creado un Estado social de Derecho con una democracia participativa y pluralista, y el artículo 137 establece el orden de prelación de las leyes. Primero la Constitución, después los tratados».
La doctora argumentó que en la Ley de Educación han trabajado la no discriminación por cuestiones de género. En la Constitución trabajaron los artículos 1, 46, 47 y 48 sobre la igualdad, el 60 sobre la no violencia, los artículos de la familia, que establecen que el Estado, la sociedad y la familia tienen responsabilidad sobre niños, niñas y adolescentes.
«Las violencias y los abusos se dan en la familia. No lo digo yo, lo dicen las estadísticas de Fiscalía y las del Poder Judicial. Entonces, tiene que ser una política compartida entre Estado, familia y sociedad, porque a veces la familia es el núcleo del abuso y de la violencia», concluyó la doctora Carmen Colazo.
La doctora Colazo, quien trabajó en la Constitución Nacional manifestó: “Si nosotros en esta ley hacemos esta prohibición (…) hacemos un trabajo sobre la prohibición absoluta de estas políticas. Decimos que los sistemas internacionales a los que pertenecemos, somos signatarios, y nos debemos y participamos. Y todas sus políticas, como la de la OEA y le rendimos informes. Nosotros no los vamos a aceptar cuando lo venimos trabajando hace 30 años. Estamos criminalizando a las mujeres, a las organizaciones de mujeres”, subrayó.
“Esto es muy grave. Yo creo que nos tendremos que exiliar del país después de esta ley, nos tendremos que exiliar como esa chica que está exiliada en el Uruguay”.
La Dra. Carmen Colazo mencionó el caso de Belén Whittingslow, que denunció a Kriskovich por acoso sexual cuando era profesor en UCA y representante ante Consejo de la Magistratura. Tras desestimarse el caso, Whittingslow buscó refugio en Uruguay, alegando persecución judicial.
«¿Qué piensan ustedes que tendremos que hacer? A mi me exilio 35 años una dictadura, pero nunca, jamás, en mi vida pensé que me iba a volver a exiliar una ley que tenía la firma de una mujer. Nunca lo imaginé» (la doctora Carmen Colazo a Lizarella Valiente, vocera del proyecto de ley prodictadura).
Para Lizarella, no existe el machismo en Paraguay, afirma que son las mujeres quienes malcrían a los hombres.
La argumentación de la doctora Carmen Colazo expuso la falta de fundamentos de la senadora Lizarella Valiente, quien se vio obligada a dar marcha atrás en la denominación del proyecto de ley. Este incidente dejó al descubierto su completa ignorancia sobre el tema.
A pesar de su evidente falta de comprensión, la senadora Valiente insiste en avanzar con una ley que, bajo la fachada de luchar contra el «adoctrinamiento homosexual» en las escuelas, revela una peligrosa inclinación hacia la discriminación y criminalización de personas defensoras de derechos humanos y LGBTQI+.
Su compromiso en «trabajar mucho por esta ley» solo resalta su obstinación en promover una agenda regresiva, desatendiendo la necesidad de una educación inclusiva y respetuosa de los derechos humanos.
Paraguay: un país machista
El machismo es un problema social y contracultural arraigado en nuestro país, que se gesta desde temprana edad, en el seno del hogar, debido a una sociedad patriarcal.
Según las estadísticas, los casos de feminicidio están en aumento en nuestro país y las cifras son alarmantes. Los especialistas aseguran que esto se debe al alto grado de machismo presente en los agresores.
De enero a junio del año 2023 se registraron 26 asesinatos de mujeres por razones machistas o misóginas. Esta cifra es la más alta de feminicidios en los últimos cinco años, y está cerca de alcanzar los números de 2018, que cerró sus primeros seis meses con 27 casos, según el Observatorio de Violencia de Género.
La Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia de Paraguay (CDIA) informó que en el país, en promedio, cada dos horas se registra una víctima de abuso sexual reportada a la Fiscalía, ya sea varón o mujer, entre 0 y 17 años. Asimismo, señala que en los últimos 5 años se registraron un total de 17,156 víctimas por abuso sexual entre 2018 y 2022.
La desigualdad en el acceso al empleo y en el nivel salarial de las mujeres en comparación con los hombres ha empeorado en las últimas dos décadas, a pesar de los esfuerzos internacionales por reducir la discriminación de género, de acuerdo con datos revelados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Según el último informe, el salario promedio de las mujeres es de G. 1,900,000, lo cual está por debajo del sueldo mínimo, y ganan en promedio G. 600,000 menos que los hombres.
Los Juzgados de Paz registraron 28,477 casos de violencia contra la mujer en 2022.
En enero de 2023, el Instituto Nacional de Estadística (INE) informó que el 78.5% de las mujeres han sufrido algún tipo de violencia en algún momento de sus vidas.
Pero para la senadora Lizarella Valiente, el machismo no existe, que gracias a los hombres se encuentra ocupando una banca en el senado.
Paraguay es un país machista, y esto no lo decimos nosotros, lo dicen las estadísticas.